Si pensáis que en este post me voy a dedicar a plagiar un monólogo sobre el objeto al que hago mención en el título no andáis demasiado lejos, aunque bien es cierto que voy a intentar enfocarlo a otro lado, más en concreto a lo importante que han sido a lo largo de la historia.

Como todos sabéis, hay muchos tipos de servilletas, las que tenemos en casa que solemos comprar en paquetes de 100 en el Mercadona de abajo, o en su defecto en el chino; las que tiene en los bares cuya única utilidad es decorativa, pues ni limpian ni secan, compradas al proveedor o a los chinos; y las de los restaurantes, que suelen ser de tela, con la marca del local, que limpian, secan y…..también están compradas en los chinos : ).
En mi caso me quiero referir a estas últimas, las de los restaurantes. Aparte de las utilidades que he mencionado antes de limpiar y secar, siempre las hemos visto formando extrañas figuras en los platos, extendidas en las piernas de la gente, de babero, envolviendo el champán, en el culo….incluso a veces para equilibrar la mesa. Pues bien, desde luego hay gente que le saco mucho más provecho.
Sin duda, estos son los casos que muestro a continuación: Sin ningún género de dudas el caso más conocido es el de Leo Messi. Corría el año 2000 y un chavalín de 13 años había deslumbrado en una prueba a uno de los técnicos del Barcelona, Carlos Rexach. A pesar de su estatura y complexión sus movimientos eran realmente increíbles y se puso manos a la obra para lograr contratarle. Prácticamente toda la cúpula del barcelonismo estaba en contra, entre otras cosas porque por aquella época Figo acababa de emigrar al eterno rival y no se entendía porque centrar la atención en aquel chaval.

Servilleta firmada por Carlos Rexach para contratar a Leo Messi
Tras enésimas reuniones, Carlos consiguió convencer a la directiva y estando comiendo en un restaurante busco un papel a su alrededor (una servilleta) y firmo una declaración de intenciones que comprometía al club a ficharlo. 3 meses después firmó su primer contrato y hoy 12 años después se ha convertido probablemente en el mejor jugador de la historia con 3 balones de oro, 3 Champions…
Otro caso similar es el de Zinedine Zidane. La casualidad quiso que ese mismo año, en Mónaco, y con la excusa de la gala de la FIFA, el presidente del Real Madrid, Florentino Pérez, en la cena posterior. Cogió una servilleta y escribió “¿Quieres jugar en el Real Madrid?”, Zidane pidió un bolígrafo y puso “YES”. Se convirtió, por entonces, en el traspaso más caro de la historia.

El último caso que os cuento es el de J. K. Rowling, autora de la saga Harry Potter. Durante un viaje a Escocia y una servilleta de papel, empezó a escribir la historia que cautivaría a millones de personas en todo el mundo y la convertiría en una de las mujeres más ricas del mundo. Muchas editoriales rechazaron el libro…….que iluminados : ).
